Patatas fritas y asadas

    Para que las patatas fritas queden deliciosas, elige las de pasta amarilla (250 g por persona) Una vez peladas, cortadas y ponlas en remojo de agua fría para eliminar el exceso de almidón; sécalas y fríelas en abundante aceite caliente; escurre, aumenta la temperatura del aceite y echa otra vez las patatas hasta dorarlas; escúrrelas sobre el papel absorbente de cocina y sálalas.

    Para las asadas, calcula unos 300 g de patatas de pasta amarilla por persona, pélalas, córtalas en rodajas gruesas, en gajos o taquitos del mismo tamaño, disponlas en una sola capa dentro de la bandeja de horno untada con aceite, condimenta con sal, romero y aceite, mezcla bien e introdúcelas en el horno a 200º C durante 30 minutos, sacudiendo a menudo la bandeja.