Cuando tenga que refrescar tu rostro cansado mezcla zumo de limón, de pomelo y agua a partes iguales. Vierte él líquido restante en cubiertas de hielo e introdúcelo en el congelador. Siempre que sientas el rostro cansado, pásate una de los cubitos por la cara y seca después con un pañuelo de papel.
No hay comentarios:
Publicar un comentario