Para lanzar piedras al aire
Sube, sube,
que te coge la nube.
Baja, baja,
que te coge la tinaja.
Para jugar con un bebé sobre las rodillas
Aserrín, aserrán,
maderitas de San Juan.
Las de la reina, las del rey
y las de mi niño también.
Para lanzar piedras al aire
Sube, sube,
que te coge la nube.
Baja, baja,
que te coge la tinaja.
Para jugar con un bebé sobre las rodillas
Aserrín, aserrán,
maderitas de San Juan.
Las de la reina, las del rey
y las de mi niño también.
1.
Cuando los pollitos
hacen pio, pio
o es que tienen hambre
o es que tiene frío.
2.
A la rueda, rueda
de pan y canela,
toma un ochavo
y vete a la escuela.
Y si no quieres ir...
¡échate a dormir!
Debajo un botón, ton, ton,
que encontró Martín, tin, tin,
había un ratón, ton, ton,
¡ay!, que chiquití, tin, tin,
era aquel ratón. ton, ton,
que encontró Martín, tin, tin,
debajo un botón, ton, ton.
Es tan juguetón ton ton,
el señor Martín, tin, tin,
que escondió el ratón, ton, ton
en un calcetín, tin, tin.
En un calcetín, tin, tin,
estaba el ratón, ton, ton,
que encontró Martín, tin, tin,
debajo un botón, ton, ton.
Para incitar a que otro te alcance.
Aquí te espero
comiendo un huevo,
patatas fritas
y un caramelo.
Para hacer rabiar
- ¡ Papá, mamá,
Pepito
me quiere pegar!
-¿Por qué?
- Por na´.
-Por un pepino,
por un tomate,
por una onza
de chocolate.
Para buscar caracoles
Caracol, col, col,
saca los cuernos al sol,
que tu padre y tu madre
también los sacó.
Para empezar a jugar a la gallina ciega
- Gallinita ciega,
¿Qué se te ha perdido?
- Una aguja y un dedal.
- Da tres vueltas
y lo encontrarás.
Para apropiarse del asiento de otro
El que se fue a Sevilla
perdió su silla.
El que se fue a Aragón
perdió su sillón.
Para llevar a alguien, entre dos, a la silla de la reina.
A la sillita de la reina,
que nunca se peina.
Un día se peinó,
cuatro pelos se arrancó
y cuatro piojos se sacó.
Para jugar a saltar
Tengo un salero
lleno de sal,
no me lo rompas
que es de cristal.
Si me lo rompes
lo has de pagar
con el dinero
que vas a ahorrar.
Para elegir entre varios
Tengo una cestita, pin,
llena de limones, pin,
naranjas, manzanas, pin,
y melocotones, pin, pones.
Un elefante se balanceaba
sobre la tela de una araña,
y como veía que no se caía
fue a llamar a otro elefante.
Dos elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Tres elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Cuatro elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Cinco elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Seis elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Siete elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Ocho elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Nueve elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
Diez elefantes se balanceaban
sobre la tela de una araña,
y como veían que no se caían
fueron a llamar a otro elefante.
San Serenin de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen los zapateros así, así, así.
Así me gusta a mí.
San Serenín de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen así los panaderos así, así, así.
Así me gusta a mí.
San Serenín de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen así los carpinteros así, así, así.
Así me gusta a mí.
San Serenín de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen así las lavanderas así, así, así.
Así me gusta a mí.
San Serenín de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen así las planchadoras así, así, así.
Así me gusta a mí.
San Serenín de la buena,
buena vida, hacen así:
hacen así las costureras así, así, así.
Así me gusta a mí.
(Para Salvarse)
Un don din de la popi, politana,
un cañón que no sirve para nada.
-Niña, ven aquí.
-Yo no quiero ir.
Salva para ti:
esto sirve un don din.
(Para contar y elegir)
Una, dola,
tela, catola,
quina, quinete,
estaba la reina
en su gabinete.
Vino Gil
y apagó el candil.
Candil, candilón,
cuenta las veinte
que las veinte son.
(Para dar envidia)
Rabia, rabiña,
que tengo una piña
con muchos piñones
y tú no los comes.
(Para elegir)
Sexta, ballesta,
Martin de la Cuesta
tenía un buey que sabía arar,
que sí, que no,
que en esta está.
(Para elegir entre dos)
Tengo un gallo
en la cocina
que me dice
la mentira.
Tengo un gallo
en el corral
que me dice
la verdad.
(Para eliminar dedos de las manos)
En un plato
de ensalada
comen todos
a la vez.
Jugaremos
a las cartas:
tengo damas,
caballo y rey.
1.
Pinto, pinto,
gorgorito,
saca la vaca
de veinticinco.
-¿En qué lugar?
-En Portugal.
-¿En qué calleja?
-En la Moraleja
Esconde la mano
que viene la vieja.
2.
Pin, pin, zarracatatín.
Vino la coneja
con la sabaneja.
Sabaneja real,
vino con la sal-
Sal molidita,
lo canta el obispo,
el obispo mayor.
Esconde la mano
y vete con Dios.
1.
Una oveja mató un gato
en la calle veinticuatro.
Un, dos, tres,
el que caiga en dieciséis.
2.
Un gato se cayó a un pozo,
las tripas le hicieron ¡gua!
Arre, moto, piti poto,
Arre, moto, piti pa.
3.
Bote, botero,
me dijo un marinero
que cuente los meses
desde el mes de enero.
4.
Marcelino
fue por vino
y quebró el jarro
por el camino.
¡Pobre jarro!
¡Pobre vino!
¡Pobrecito
Marcelino!
5.
Pin, pon Auserón
tres gallinas y un capón.
El capón estaba muerto
y las gallinas en el huerto.
Tris, tras, fuera estás.
6.
Yo tengo unas tijeras
que se abren y se cierran.
Yo toco el cielo
yo toco el suelo,
yo me arrodillo,
yo salgo fuera.
PARA ELEGIR UNA MANO
1
Tengo un pajarito
que canta y que vuela.
¿Dónde está la china,
dentro o fuera?
2
Esconde la piedra,
escóndela bien,
que no te la vean
vasallo ni rey.
3
China, china,
china doy
y salvado estoy.
PEPITO
Pepito conejo
al bosque salió,
corre, corre, corre,
desobedeció.
"Ven, ven, conejito"
decía su mamá.
"Ven, ven, conejito,
que te matarán"
De pronto aparece un gran cazador
que de su escopeta,
¡pum, pum!
dos tiros soltó.
Salta el conejito,
salta el cazador,
llegó a su casita
y la puerta cerró.
EL GATO Y EL RATÓN
Era un gato grande
que hacía "ron, ron",
muy acurrucado
en un almohadón.
No abría los ojos,
se hacía el dormido,
movía la cola
con aire aburrido.
Era un ratoncito
chiquitito, chiquitito,
que asomaba el morro
por un agujerito.
Desaparecía
volvía a asomarse,
y daba un grito, "¡i, i!"
antes de ocultarse.
Dejó su escondite,
corrió por la alfombra
y miedo tenía
hasta de su sombra.
Pero al dar la vuelta
sintió un gran estruendo.
Vio los ojos grandes
de un gato tremendo.
Sintió un gran zarpazo
sobre su rabito
y se echó a correr
todo asustadito.
Y aquí acaba el cuento
de mi ratoncito
que asomaba el morro
por un agujerito.
LA PALOMA
Una paloma blanca
que del cielo bajó
con las alas doradas
y en el pico una flor.
De la flor, una lima,
de la lima, un limón;
vale más mi morena
que los rayos del sol.
ME CASÉ
Me casé con un enano
solamente por reír, por reír;
le puse la cama alta
y no se pudo subir.
Al subir las escaleras
una pulga le picó,
la cogió por las orejas,
la tiró por el balcón.
¡Pobrecita aquella pulga!
¡Menuda muerte llevó!
EL PERRITO CHINO
Me tendo que ir a vivir, a vivir,
a las orillas del mar, de la mar,
por ver los marineritos, sí, sí,
que vienen de navegar, de navegar.
Al salir de La Habana,
de nadie me desoedí, me despedí,
sólo de un perrito chino
que venía tras de mí, tras de mi.
El perro, como era chino,
un señor me lo cambió, me lo cambió,
por un poco de dinero
y unas botas de charol, de charol.
Si mi padre se enterara,
¡qué paliza me daría, me daría!
Me encerraría en un cuarto
y a la calle no saldría, no saldría.
Las botas se me rompieron
y el dinero se acabó, se me acabó.
Adiós, perro de mi alma,
adiós, perro de mi amor.
LA PASTORA
Estaba una pastora,
larán, larán, larito,
estaba una pastora
cuidando el rebañito.
Con leche de sus cabras,
larán, larán, larito,
con leche de sus cabras
hacía quesitos.
El gato la miraba,
larán, larán, larito,
el gato la miraba
con ojos golositos.
Si me hincas la uña,
larán, larán, larito,
si me hincas la uña
te cortaré el rabito.
La uña se la hincó,
larán, larán, larito,
la uña se la hincó
y el rabito se le cortó,
y el rabito le cortó.
A MI BURRO
A mi burro, a mi burro
le duele la cabeza
y el médico le manda
una gorrita negra.
Una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
le duele la nariz
y el médico receta
agüita con anís.
Agüita con anís,
una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
le duele la garganta
y el médico le a puesto
una bufanda blanca.
Una bufanda blanca,
agüita con anís,
una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
le duele el corazón
y el médico le ha dado
jarabe de limón.
Jarabe de limón,
una bufanda blanca,
agüita con anís,
una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
le duelen las rodillas
y el médico le indica
un frasco de pastillas.
Un frasco de pastillas,
jarabe de limón,
una bufanda blanca,
agüita con anís,
una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
le duelen las pezuñas
y el médico le pide
que se lime las uñas.
Que se lime las uñas,
un frasco de pastillas,
jarabe de limón,
una bufanda blanca,
agüita con anís,
una gorrita negra,
mi burro enfermo está.
A mi burro, a mi burro
ya no le duele nada,
pero el muy perezoso
se ha quedado en la cama.
CARABÍ
En coche va una niña, carabí,
en coche ca una niña, carabí,
hija de un capitán,
Carabrirulí, carabirula,
hija de un capitán.
¡Qué hermoso pela tiene!, carabí
¡qué hermoso pelo tiene!, carabí
¿quién se lo peinará?
Se lo peina su madre, carabí
se lo peina su madre, carabí,
con mucha suavidad.
Carabrirulí, carabirula,
con mucha suavidad.
Con peinecitos de oro, carabí.
con peinecitos de oro, carabí,
y horquillas de cristal.
Carabrirulí, carabirula,
y horquillas de cristal.
La niña está malita, carabí,
la niña está malita, carabí,
¿Cuándo se sanará?
Carabrirulí, carabirula,
¿Cuándo se sanará?
La niña ya está buena, caribí,
la niña ya está buena, caribí,
con ganas de jugar.
Carabrirulí, carabirula,
con ganas de jugar.
y al pie de su ventana, carabí,
un pajarito está.
Carabrirulí, carabirula,
un pajarito está.
MAMBRÚ
Mambrú se fue a la guerra,
qué dolor qué dolor, qué pena,
Mambrú se fue guerra
y no sé cuándo vendrá,
do re mi, do re fa,
no sé cuándo vendrá.
Si vendrá por Pascua,
qué dolor, qué dolor, qué guasa,
si vendrá por la Pascua
o por la Trinidad.
La Trinidad se pasa,
qué dolor, qué dolor, qué rabia,
la Trinidad. se pasa
y Mambru no llega ya,
do re mi, do re fa,
Mambru no llega ya.
Me he subido a la torre,
qué dolor, qué dolor que corre,
me he subido a la torre
por ver si llegará.
Por allí viene un paje,
qué dolor, qué dolor, qué traje,
por allí viene un paje,
¿qué noticias traerá?
do re mi, do re fa,
¿Qué noticias traerá?
Las noticias que traído
qué dolor, qué dolor, qué trago,
las noticias que traigo
dan ganas de llorar,
do re mi, do re fa,
dan ganas de llorar.
Que Mambrú ya se ha muerto
qué dolor, qué dolor, qué cuerpo,
que Mambrú ya se ha muerto
y lo llevan a enterrar,
do re mi, do re fa,
y lo llevan a enterrar.
Con caja de terciopelo,
qué dolor, qué dolor que tengo,
con caja de terciopelo
y tapa de cristal,
do re mi, do re fa,
y tapa de cristal.
Y encima de la timba,
qué dolor, que dolor que zumba,
y encima de la tumba
dos pajarillos van,
do re mi, do re fa,
dos pajarillos van.
Cantando el pío, pío,
qué dolor, qué dolor, que lío,
cantando el pío pío,
cantando el pío pa,
do re mi, do re fa,
cantando el pío pa,
TENGO, TENGO, TENGO
Tengo, tengo, tengo,
tú no tienes nada,
tengo tres ovejas
en una cabaña.
Una me da leche,
otra me da lana,
y otra mantequilla
para la semana.
Caballito blanco
llévame hasta el pueblo
donde yo nací.
CALLE DEL CARMEN
Calle del Carmen,
número uno,
vive mi amante
piso segundo.
Las escaleras
son de tomate
para que Paco
suba y se mate.
Las escleras
son de marfil
para que Pepe pueda subir
La campanita
es de cristal
para que Pepe
pueda llamar.
Y el ventanillo
es de oro fino
para que Pepe
hable conmigo.
VAMOS A CONTAR MENTIRAS
Ahora que vamos despacio (bis)
vamos a contar mentiras, tralará (bis)
vamos a contar mentiras.
Por el mar corren las liebres (bis),
por el monte las sardinas, tralará (bis),
por el monte las sardinas.
Salí de mi campamento (bis),
con hambre de seis semanas, tralará (bis),
con hambre de seis semanas.
Me encontré con un ciruelo (bis),
cargadito de manzanas, tralará (bis),
cargadito de manzanas.
Comencé a tirarle piedras (bis),
y caían avellanas, tralará (bis),
y caían avellanas.
Con el ruido de las nueces (bis),
salió el amo del peral, tralará (bis),
salió el amo del peral.
Chiquillo no tires piedras (bis),
que no es mío el melonar, tralará (bis),
que no es mío el melonar.
Que es de una pobre señora (bis),
que habita en El Escorial, tralará (bis)
que habita en El Escorial.
TENGO UNA MUÑECA
Tengo una muñeca
vestida de azul,
con su camisita
y su canesú.
La saqué a paseo,
se me constipó;
la tengo en la cama
con mucho dolor.
Esta mañanita
me dijo el doctor
que la dé jarabe
con un tenedor.
Dos y dos son cuatro,
cuatro y dos son seis,
seis y dos don ocho,
y ocho dieciséis.
Y ocho veinticuatro,
y ocho treinta y dos.
Ánimas benditas
me arrodillo yo.
EL SEÑOR DON GATO
Estaba el señor don Gato
sentadito en su tejado,
marramamiau, miau, miau,
sentadito en su tejado.
Ha recibido una carta:
que si quiere ser casado,
marramamiau, miau, miau,
que si quiere ser casado.
Con una gatita blanca,
sobrina de un gato pardo,
marramamiau, miau, miau,
sobrina de un gato pardo.
El gato, por ir a verla,
se ha caído del tejado,
marramamiau, miau, miau,
se ha caído del tejado.
Se ha roto siete costillas,
el espinazo y el rabo,
marramamiau, miau, miau,
el espinazo y el rabo.
Ya lo llevan a enterrar
por la calle del pescado,
marramamiau, miau, miau,
por la calle del pescado.
Al olor de las sardinas
el gato ha resucitado,
marramamiau, miau, miau,
el gato ha resucitado.
Por eso dice la gente:
siete vidas tiene un gato,
marramamiau, miau, miau,
siete vidas tiene un gato.
EL GRILLITO CRI-CRI-CRI
Nunca supe dónde vive,
nunca en la casa lo vi,
pero todos escuchamos
al grillito Cri-cri-cri.
¿Vivirá en la chimenea
o bajo de un baldosín?
¿Dónde canta cuando llueve
el grillito Cri-cri-cri?
¿Vive acaso en la azotea
o escondido en un rincón,
o debajo de la cama
o metido en un arcón?
¿Dónde puede estar metido,
dónde, astuto, se oculto?
¿Será dentro de un zapato
o bajo de un almohadón?
Nunca supe dónde vive,
nunca en casa lo vi,
pero todos lo escuchamos
al grillito Cri-cri-cri.
Pero todos escuchamos
al grillito Cri-cri-cri
EL CONDE OLINOS
Madrugaba el conde Olinos,
mañanita de San Juan,
a dar agua a su caballo
a las orillas del mar.
Mientras el caballo bebe
se oye un hermoso cantar;
las aves que iban volando
se paraban a escuchar.
Desde la torre más alta
la reina le oyó cantar;
- Mira, hija, cómo canta
una sirena del mar.
- No es la sirena, madre,
que ésa tiene otro cantar;
es la voz del cande Olinos
que por mi pensando está.
-Si es la voz del cande Olinos
yo le mandare matar,
que para casar contigo
le falta sangre real.
- No le mande matar, madre,
no le mande usted matar,
que si mata al conde Olinos
a mí la muerte me da.
Guardias mandaba la reina
al conde buscar,
que le maten a lanzada
y echen su cuerpo a la mar.
La infantita, con gran pena,
no cesaba de llorar.
Él murió a la medianoche;
ella, a los gallos cantar.
INGREDIENTES:
PREPARACIÓN
INGREDIENTES
PREPARACIÓN:
LA VIUDITA
Yo soy la viudita
del conde Laurel,
que quiero casarme
y no encuentro con quién.
Si quieres casarte
y no encuentras con quién,
escoge a tu gusto
que aquí tienes cien,
aquí tienes cien.
Escojo a esta niña
por ser la más bella,
la dulce doncella
de mayo y abril,
de mayo y abril.
Yo soy la viudita
del Conde Laurel ,
que quiero casarme
y ya sé con quién, ya sé con quién,
EL BURRO DE LA TÍA CINAGRE.
Ya se murió el burro
de la tía Vinagre
ya lo llevó Dios
de esta vida miserable.
Que trurururururú
que turururururú,
que turururururú,
que turururururú.
Él era valiente,
él era mohino,
el era alivio
de todos los vecinos.
Estribillo
Ya estiro la pata,
ya cerró el hocico
y con el rabo, dijo:
"Adiós, adiós, Perico."
Estribillo
Todos los vecinos
fueron al entierro
y la tiena Vinagre
tocaba el cencerro.
Que trurururururú
que turururururú,
que turururururú,
que bien lo sabes tú.
LA RANA
Estaba la rana sentada
cantando debajo del agua.
Cuando la rana se puso a cantar,
vino la mosca y la hizo callar.
La mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando la mosca se puso a cantar,
vino la araña y la hizo callar.
La araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando la araña se puso a cantar,
vino el ratón el ratón y lo hizo callar.
El ratón a la araña,
la araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando el ratón se puso a cantar,
vino el gato y lo hizo callar.
El gato al ratón,
el ratón a la araña,
la araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando el gato se puso a cantar,
vino el perro y lo hizo callar.
El perro al gato
el gato al ratón,
el ratón a la araña,
la araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando el perro se puso a cantar,
vino el hombre y lo hizo callar.
El hombre al perro,
el perro al gato,
el gato al ratón,
el ratón a la araña,
la araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando el hombre se puso a cantar,
vino la mujer y le hizo callar.
La mujer al hombre,
el hombre al perro,
el perro al gato,
el gato al ratón,
el ratón a la araña,
la araña a la mosca,
la mosca a la rana,
la rama sentada cantando
debajo del agua.
Cuando la mujer se puso a cantar...
¡ni el mismo diablo la hizo callar!
DIEZ PERRITOS
Yo tenía diez perritos (bis)
uno se perdió en la nieve,
no me quedan más que nueve.
De los nueve que quedaban (bis)
uno se comió un bizcocho,
no me quedan más que ocho.
De los ocho que quedaban (bis)
uno se metió en un brete,
no me quedan más que siete.
De los siete que quedaban
uno ya no lo veréis,
no me quedan más que seis.
De los seis que quedaban (bis)
uno se mató de un brinco,
no me quedan más que cinco,
De los cinco que quedaban (bis)
uno se marchó al teatro
no me quedan más que cuatro.
De los cuatro que quedaban, (bis)
uno se volvió al revés,
no me quedan más que tres.
De los tres que quedaban, (bis)
uno se murió de tos,
no me quedan más que dos.
De los dos que quedaban, (bis)
uno se me hizo tuno,
no me queda más que uno.
Y el perro que me quedaba
un día se marchó al campo
y ya no me queda ninguno
de los diez perritos
DE LA UVA
De la uva sale el vino,
de la aceituna el aceite,
y de mi corazón sale, ¡ay!,
cariño para quererte.
Eres alta y buena moza,
no te lo presumas tanto,
que también las buenas mozas, ¡ay!,
se quedan pa´vestir santos.
Anda diciendo tu madre
que tienes un olivar, y ese olivar que tú tienes, ¡ay!,
es que te quieres casar.
Va murmurando la gente
que queremos casar,
niégalo tú, vida mía, ¡ay!,
que también lo niego yo.